Llega el lunes vas a trabajar, te despiertas temprano te alistas, te preparas y vistes el uniforme de tu empresa, sales de casa, subes a tu auto o al transporte público, caminas por la acera y llegas a tu puesto; sabías que durante este trayecto fuiste observado por un promedio de 50 personas cada 30 minutos.
Si hacemos más cálculos esto sería un índice de exposición de tu marca similar al de una valla de carretera, muchas veces hasta con mayor impacto. Ahora imagina una persona que va en el transporte publico con su uniforme puesto y en un viaje de 30 minutos está siendo observada tu marca bordada en la camisa de uno de tus colaboradores. Esto genera recordación.
Por lo que con total claridad se confirma que al menos una de esas personas llegará a convertirse en tu cliente considerando la exactitud con la que el uniforme fue diseñado y portado.
Recuerda un uniforme es más que una camisa y un estampado. Un uniforme es la cara de la marca hacia el cliente.